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| Jeff Fausto sitio |
Viento de otoño
José Hierro
Hemos visto, ¡alegría!, dar el viento
gloria final a las hojas doradas.
Arder, fundirse el monte en llamaradas
crepusculares, trágico y sangriento.
Gira, asciende, enloquece, pensamiento.
Hoy da el otoño suelta a sus manadas.
¿No sientes a lo lejos sus pisadas?
Pasan, dejando el campo amarillento.
Por esto, por sentirnos todavía
música y viento y hojas, ¡alegría!
Por el dolor que nos tiene cautivos,
por la sangre que mana de la herida
¡alegría en el nombre de la vida!
Somos alegres porque estamos vivos.
gloria final a las hojas doradas.
Arder, fundirse el monte en llamaradas
crepusculares, trágico y sangriento.
Gira, asciende, enloquece, pensamiento.
Hoy da el otoño suelta a sus manadas.
¿No sientes a lo lejos sus pisadas?
Pasan, dejando el campo amarillento.
Por esto, por sentirnos todavía
música y viento y hojas, ¡alegría!
Por el dolor que nos tiene cautivos,
por la sangre que mana de la herida
¡alegría en el nombre de la vida!
Somos alegres porque estamos vivos.
Viento de otoño
de Alegría - 1947
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| Stanilaus Soutten Longley 1894-1966 |
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| Land Art - Richard Shilling referencia |
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| fuente |
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| fuente |
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| Jonathan Wolstenholme wiki |
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| Marta Zafra |
2 comentarios:
Otoño, me gusta de esta estación ver las hojas doradas caer y caminar sobre ellas y sentir su crujido.
Abrazo Clarissa
Si, Francisco, caminar sobre las hojas doradas es un verdadero placer.
Me encanta también ver caer las hojitas de los abedules, como preciosas monedas, leves y ligeras... como una lluvia de oro...
Un abrazo, querido amigo.
Gracias por tu visita
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